Qué tarde la de aquel día...

La imagen es de Iván Benítez, que tiene arte hasta para hacer fotos con el móvil. La silueta que levanta la mano soy yo. El que sujeta el vaso a la derecha es Jesús y el toro que anda por el ruedo es un Miura.

Fue una de las tardes de los Sanfermines en la plaza de toros. Si el día anterior, el sábado, la corrida fue un espectáculo con la lluvia y los toros de Dolores Aguirre desde el tendido 7 del Irrintzi, la tarde del domingo no lo fue menos. Toros de Miura vistos desde la prudencia considerable que marca la andanada 11 de la peña Rochapea. Juan José Padilla en la arena (illa, illa, illa, Padilla Maravilla), bastante acelerado, por cierto. Y en las bancadas de cemento una buena compañía. Jonan, Tuca, Iván y el mítico Blondie, que no se ha perdido ni una tarde en la palomera de su peña. Y cómo aguanta el tío. Tanto que ayer, ya acabadas las fiestas, se fue a ver a Bruce Springsteen a SS. Jonan Basterra, que lleva 16 años ininterrumpidos dejando todo lo que tiene entre manos para venir a Pamplona a disfrutar y a trabajar con las fiestas (qué fotos que hace el tío), nos trajo unas albóndigas de su madre inconmensurables. Las comimos en bocadillo y todos sacamos el pañuelo blanco para pedir la vuelta al ruedo a la cocinera (Puedes leer su crónica aquí). Igual de buenas estaban las manicas de cerdo de Iván. La solidaridad de la andanada hizo el resto y así nos llegó un buen trozo de bizcocho de nata, tisamisú, etc.. Todo ello lo acompañamos con la bebida mágica de los Sanfermines y un poquito de mojito, que duró hasta más allá de la salida de las peñas.. Nos divertimos, cantamos, bailamos, disfrutamos, reímos... Y mientras, Padilla y su compañeros de terna dieron una tarde inolvidable. Hasta cuatro orejas se cortaron a los Miuras. Fue una tarde de San Fermín.